PARA APROXIMARSE A SAN JUAN DE ÁVILA, DOCTOR DE
LA IGLESIA
Introducción
Estamos llegando a un
punto culminante de un largo recorrido: San Juan de Ávila será
proclamado el 7 de octubre de 2012 Doctor de la Iglesia Universal.
San Juan de Ávila es un regalo del Espíritu a su Iglesia, como nos
decía la misma Teresa de Jesús: “una gran columna”. Creo que el
Santo Maestro es un regalo muy especial para nuestro tiempo,
necesitado de hombres llenos de Dios que nos acerquen a Dios. Sin
duda, es un regalo del Espíritu para la Iglesia de hoy: laicos,
consagrados, presbíteros, obispos, etc. Creo que no es casualidad
que en los comienzos del tercer milenio y en el contexto de la
aplicación más fuerte del Concilio Vaticano II y de la nueva
evangelización San Juan de Ávila se ponga encima del candelero para
que su luz alumbre a todos los de casa y así den gloria al Padre que
está en los cielos. Su proclamación como Doctor de la Iglesia es un
punto de llegada y comienzo de una tarea. El papa Benedicto XVI al
anunciar la fecha de la declaración de Doctor Universal, junto a la
Santa Hildegarda de Bingen, nos decía en el Regina Coeli:
“Estas dos figuras de santos y doctores son de gran importancia y
actualidad. Incluso hoy en día, a través de su enseñanza, el
Espíritu del Señor Resucitado sigue resonando su voz y para
iluminar el camino que conduce a la verdad que es lo único que puede
hacernos libres y dar pleno sentido a nuestras vidas”